El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, realizó su primera intervención en la Semana de Alto Nivel de la Asamblea General de la ONU, donde acusó a Rusia de "genocidio" por la deportación de niños ucranianos. Zelenski destacó la invasión de Rusia a Ucrania como el tema central en esta primera sesión.

El mandatario ucraniano señaló que los niños ucranianos deportados a Rusia son adoctrinados con odio hacia Ucrania y se les separa de sus familias, lo que calificó como un acto de "genocidio". Esta acusación marca un nuevo nivel de la creciente tensión entre Ucrania y Rusia debido al conflicto en curso.

En su discurso, Zelenski hizo un llamado a una cumbre de naciones con ideas afines para abordar la situación en Ucrania. Propuso la celebración de una "Cumbre Mundial por la Paz" e invitó a todas las naciones que rechazan la agresión a unirse en la preparación de esta cumbre. Zelenski destacó la importancia de abordar la crisis en Ucrania y la necesidad de buscar una solución pacífica a través del diálogo internacional.

Además, el presidente ucraniano expresó su preocupación por la posibilidad de que Rusia, como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, posea armas nucleares, argumentando que "los terroristas no tienen derecho a poseer armas nucleares".

Zelenski también denunció el uso por parte del gobierno de Rusia de la energía y los alimentos como armas para presionar a nivel internacional. Destacó que esta táctica no solo afecta a Ucrania sino también a otras naciones, instando a la comunidad internacional a tomar medidas para abordar esta amenaza.

El discurso de Zelenski enfatizó la gravedad de la situación en Ucrania y la necesidad de una respuesta internacional decidida para buscar una solución pacífica y proteger la independencia y soberanía del país.

En la misma sesión de la Asamblea General de la ONU, el presidente de Brasil, Luis Inácio Lula da Silva, hizo un llamado al diálogo como una solución para resolver el conflicto en Ucrania. Lula señaló que el conflicto en Ucrania demuestra la incapacidad colectiva para aplicar los principios de la Carta de las Naciones Unidas y subrayó la importancia de crear espacio para las negociaciones y el diálogo.

Lula mencionó que el conflicto en Ucrania representa un desafío para hacer cumplir los objetivos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y enfatizó la necesidad de buscar una solución a través del diálogo. El mandatario brasileño se reunirá con su homólogo ucraniano durante la Asamblea General de la ONU, lo que podría ser un paso importante hacia la búsqueda de una solución pacífica al conflicto.

Las relaciones entre Brasil y Ucrania han sido tensas debido a las declaraciones previas de Lula sobre el conflicto y la negativa de Brasil a suministrar armas a Ucrania. Sin embargo, Brasil ha buscado un papel de mediador en el conflicto y ha reiterado la importancia del diálogo como una vía para lograr la paz en Ucrania.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, instó a la Asamblea General de la ONU a detener la "agresión descarnada" de Rusia en Ucrania. Biden advirtió que la independencia de todos los Estados está en peligro debido a la invasión rusa en Ucrania y destacó la importancia de hacer frente a esta agresión para evitar que otros posibles agresores sigan su ejemplo.

El presidente estadounidense señaló que el precio de la paz para Rusia es la capitulación de Ucrania y que Rusia busca "brutalizar" a Ucrania sin consecuencias. Biden reiteró el compromiso de Estados Unidos y sus aliados de apoyar al pueblo de Ucrania en su lucha por expulsar a las fuerzas rusas del país.

El discurso de Biden fue aplaudido en la sala y enfatizó la importancia de abordar la crisis en Ucrania y defender los principios de paz y soberanía nacional de la ONU. Biden instó a la comunidad internacional a hacer frente a la agresión rusa y a tomar medidas decididas para proteger la independencia de las naciones.