El analista Alfredo Jalife enfrenta cargos por calumnia y difamación, presentados por Tatiana Clouthier en diciembre de 2022, alegando que el analista afirmó que la política mexicana se apoderó del litio del país y lo entregó a Estados Unidos. Un juez de Control en Monterrey vinculó a Jalife a proceso, pero le permitió llevarlo en libertad, ya que se trata de delitos no graves.

Como parte de las condiciones, Jalife tiene prohibido acercarse a Clouthier y a su domicilio. Además, se estableció un plazo de 60 días para el cierre de la investigación complementaria.

La detención de Jalife tuvo lugar el 6 de diciembre en la Ciudad de México, siendo trasladado posteriormente a las autoridades de Nuevo León. El presidente Andrés Manuel López Obrador expresó la importancia de garantizar la libre manifestación de las ideas, aunque reconoció que puede haber excesos.

"Tenemos que garantizar la libre manifestación de las ideas, que no haya censura. Pueden haber excesos, pero no debe limitarse la libertad. Podemos no estar de acuerdo con lo que se expresa, pero debemos garantizar el derecho a manifestarnos libremente", declaró López Obrador.

El caso destaca la delgada línea entre la libertad de expresión y la responsabilidad por difamación en el contexto político, subrayando la importancia de equilibrar estos derechos en una sociedad democrática.