Alejandro "Alito" Moreno se registró este lunes ante la Comisión Nacional de Procesos Internos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para buscar su reelección como dirigente nacional del partido. Moreno, quien actualmente ocupa el cargo, va en fórmula con Carolina Viggiano, la secretaria general del PRI.

Este registro ocurre tras la aprobación de polémicas reformas estatutarias realizadas hace dos semanas, las cuales fueron impulsadas por el propio Moreno. Dichas reformas fueron aprobadas sin discusión durante la XXIV Asamblea Nacional del PRI el pasado 7 de junio. Estas modificaciones permiten que Moreno Cárdenas y Viggiano puedan mantenerse en sus cargos hasta el año 2032, sumando así 13 años en sus puestos que asumieron en agosto de 2019.

Los cambios avalados en la Asamblea consisten principalmente en la modificación del primer párrafo del artículo 172 de los estatutos del PRI, que ahora estipula que la dirigencia nacional y las estatales pueden ser reelectas hasta por tres periodos consecutivos, cada uno de cuatro años.

Sin embargo, estas reformas han generado oposición dentro del PRI. Priístas como Dulce María Sauri Riancho, Enrique Ochoa Reza, Pedro Joaquín Coldwell y Manlio Fabio Beltrones han impugnado esta reforma ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).

El magistrado del TEPJF, Reyes Rodríguez Mondragón, hizo público un proyecto en el que propone dar 10 días al Instituto Nacional Electoral (INE) para determinar la legalidad de la modificación de los estatutos del PRI. Si el proyecto es avalado por el Pleno del TEPJF, las impugnaciones presentadas serían declaradas improcedentes y reencauzadas al INE, que tendrá hasta el 11 de agosto para analizar la constitucionalidad y legalidad de las reformas del PRI.

Está previsto que este lunes se realice formalmente el registro de los aspirantes a la dirigencia del PRI y que dos días después inicie la contienda interna, con el objetivo de que el proceso de renovación concluya el 10 de agosto.

Dulce María Sauri advirtió sobre el temor de que se acorte el proceso de elección al no registrarse más que una fórmula, la de Moreno y Viggiano, lo que podría llevar a una reelección anticipada.