Abelardo Valenzuela, fiscal Anticorrupción de Chihuahua, informó que la Fiscalía Anticorrupción del estado obtuvo recientemente una orden de aprehensión contra el exgobernador Javier Corral, quien es investigado por su presunta participación en un delito de peculado agravado relacionado con el desvío de 98 millones de pesos.

Según la denuncia presentada, Corral habría estado involucrado en la simulación de un contrato con un particular para la reestructuración de la deuda del estado. Sin embargo, dicha reestructuración no se materializó, ya que no se cumplieron los entregables previstos, lo que resultó en un presunto desvío de recursos.

El fiscal Valenzuela explicó que esta denuncia surgió tras una revisión exhaustiva realizada por la Auditoría Superior del Estado, la cual detectó la irregularidad y dio aviso a la Fiscalía Anticorrupción para proceder con la investigación.

La orden de aprehensión fue concedida por un juez de control, y no por la Fiscalía Anticorrupción, como algunos han especulado. Valenzuela subrayó que los jueces federales, a través de la vía del amparo, son los únicos autorizados para revisar si las órdenes de aprehensión proceden o no. En cumplimiento con los protocolos establecidos, la Fiscalía Anticorrupción había coordinado previamente con las autoridades de la Ciudad de México para ejecutar la detención.

Sin embargo, el fiscal reveló que surgieron problemas inesperados durante el proceso. Tras entregar el convenio de colaboración a las autoridades capitalinas y recibir su autorización, el equipo de la Fiscalía de Chihuahua se encontró con una resistencia inesperada en la Ciudad de México, lo que impidió la detención de Corral.

La situación ha generado controversia y ha puesto en evidencia las dificultades en la cooperación entre las distintas autoridades judiciales del país, mientras se espera que se aclaren los próximos pasos a seguir en el caso contra Javier Corral.