El exsecretario mexicano de Seguridad Pública, Genaro García Luna, fue condenado a más de 38 años de prisión en un tribunal de Nueva York, además de una multa de dos millones de dólares, por delitos relacionados con el narcotráfico y colaboración con el Cártel de Sinaloa. Durante la audiencia, el juez Brian Cogan acusó a García Luna de llevar una "doble vida", facilitando el funcionamiento del cártel mientras mantenía una imagen de líder familiar.

"No es responsable directo de todas las muertes por el tráfico de drogas, pero sí fue uno de sus grandes facilitadores," declaró el juez, comparando su mentalidad con la de Joaquín 'El Chapo' Guzmán. A pesar de las graves acusaciones, García Luna reiteró su inocencia, afirmando que las pruebas presentadas en su contra provenían de información falsa del gobierno mexicano.

Durante la sesión, García Luna se mostró serio y, tras escuchar la sentencia, su defensa expresó cierto alivio ya que la Fiscalía había solicitado cadena perpetua. Su abogado, César de Castro, argumentó que los 20 años iniciales propuestos eran ya "demasiados" y que la condena no debía ser comparada con otros casos como el del expresidente hondureño Juan Orlando Hernández.

La Fiscalía, por su parte, fue contundente: "Él era el cartel," señalaron, agregando que García Luna fue peor que "El Chapo" al ser el principal facilitador del cártel. El fiscal del Distrito Este de Nueva York, Breon Peace, lo responsabilizó de la importación de más de un millón de kilogramos de drogas a Estados Unidos y de una violencia incalculable en México y EE.UU.

Con esta sentencia, más de año y medio después de ser declarado culpable de cinco cargos, Nueva York reafirma su papel como epicentro de los grandes juicios contra el narcotráfico latinoamericano, con la próxima audiencia contra Ismael 'El Mayo' Zambada en camino.

A las afueras del tribunal, manifestantes gritaban: "Felipe Calderón, eres el siguiente."