La consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE), Guadalupe Taddei Zavala, hizo uso de sus nuevas facultades para designar a José Arévalo Romo como titular de la Unidad Técnica de Transparencia y Protección de Datos Personales, en una decisión que ha generado controversia debido a la falta de experiencia del funcionario en el área.

Este nombramiento marca la primera vez que Taddei Zavala ejerce su facultad de designación directa sin someter la decisión al Consejo General del INE, una atribución que le fue otorgada tras la reforma judicial y sus leyes secundarias. Sin embargo, la elección de Arévalo Romo ha sido señalada por su perfil, ya que no cuenta con antecedentes profesionales en materia de transparencia ni protección de datos personales.

Arévalo Romo ingresó al INE como director de Información de la Coordinación Nacional de Comunicación Social y, recientemente, fue removido de ese cargo tras recibir diversas quejas internas y de medios de comunicación. A pesar de ello, se mantuvo cercano a la consejera presidenta, lo que ahora lo ha llevado a ocupar una posición clave dentro del organismo electoral.

El nombramiento ha despertado críticas de sectores que cuestionan la idoneidad del funcionario para una responsabilidad estratégica dentro del INE. La transparencia y el acceso a la información son pilares fundamentales para la confianza en las instituciones democráticas, por lo que la designación de un perfil sin experiencia en el área plantea dudas sobre el rumbo que tomará el organismo en esta materia.

En un contexto en el que el INE enfrenta desafíos cruciales de cara al próximo proceso electoral, la designación de Arévalo Romo podría convertirse en un foco de tensión dentro del instituto, en medio del escrutinio público sobre la independencia y profesionalismo de sus decisiones.