El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, confirmó que el exmandatario estatal, Silvano Aureoles, se encuentra prófugo de la justicia, luego de que una jueza federal girara una orden de aprehensión en su contra por presuntos actos de corrupción.

En conferencia de prensa, Ramírez Bedolla detalló que la Fiscalía General de la República (FGR) continúa las investigaciones para dar con su paradero, realizando operativos en Michoacán y otros estados del país.

“La situación jurídica en este momento es de prófugo. Está huyendo de la justicia y la FGR sigue con las pesquisas para cumplimentar la orden de aprehensión”, declaró el gobernador.

Aureoles, quien gobernó Michoacán de 2015 a 2021, es investigado por un presunto desfalco millonario en la construcción de siete cuarteles policiales, los cuales habrían sido adquiridos a sobreprecio con recursos de procedencia irregular.

Según la Secretaría de Contraloría del Estado de Michoacán (Secoem), su administración comprometió aproximadamente 5 mil millones de pesos en estos proyectos, de los cuales se erogaron 3 mil 468 millones, generando sospechas de corrupción.

Los cuarteles, ubicados en Apatzingán, Lázaro Cárdenas, Huetamo, Uruapan, Coalcomán, Jiquilpan y Zitácuaro, fueron construidos con instalaciones de lujo y blindaje especial, en contraste con las precarias condiciones en las que operaban los elementos de seguridad.

Ante estas irregularidades, en febrero de 2022, la Secretaría de Contraloría presentó una denuncia ante la FGR, que posteriormente judicializó el caso y obtuvo órdenes de aprehensión contra varios exfuncionarios de la administración de Aureoles.

Hasta el momento, cuatro exfuncionarios cercanos a Aureoles han sido detenidos y enfrentan prisión preventiva:

Carlos “N”, exsecretario de Finanzas.
Antonio “N”, exsecretario de Seguridad.
Elizabeth “N”, exdelegada administrativa de la Secretaría de Seguridad Pública.
Mario “N”, exdelegado administrativo de la Secretaría de Seguridad Pública.

Las acusaciones en su contra incluyen peculado, administración fraudulenta, operaciones con recursos de procedencia ilícita y asociación delictuosa.

Mientras tanto, las autoridades federales mantienen operativos en varias entidades para localizar al exgobernador, cuyo paradero sigue siendo desconocido. La FGR continúa con las investigaciones y no se descartan nuevas órdenes de captura en el caso.