El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, informó que el gobierno mexicano iniciará una serie de consultas con los sectores afectados por la posible imposición de aranceles al acero y aluminio por parte de Estados Unidos, con el objetivo de definir una estrategia antes del 2 de abril, fecha en que podrían entrar en vigor las medidas comerciales.

Ebrard enfatizó que la administración federal no tomará decisiones precipitadas y mantendrá una postura estratégica basada en la negociación. "Vamos a tener pláticas muy intensas, planteando la posición de México sobre la base de que la integración con nuestro país es excepcional. No hay ningún otro país, salvo Canadá, con el que EE.UU. tenga una relación económica como la que existe con México", afirmó.

El titular de Economía aseguró que la mejor estrategia en este escenario es actuar con "sangre fría y firmeza", evitando respuestas reactivas que puedan generar mayores tensiones comerciales. Subrayó que esta postura ya está dando resultados y que el gobierno continuará con este enfoque en las negociaciones con Washington.

México busca evitar un conflicto comercial que afecte a sectores clave de su economía, mientras que Estados Unidos argumenta que los aranceles buscan proteger su industria nacional. En este contexto, la administración mexicana trabaja para defender sus exportaciones sin comprometer la estabilidad de la relación bilateral ni el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).