La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, no se reunirá finalmente con su homólogo estadounidense, Donald Trump, en el marco de la Cumbre del G7 que se celebra en Kananaskis, Canadá, luego de que el mandatario republicano abandonara anticipadamente el encuentro internacional debido a la escalada del conflicto entre Israel e Irán. Así lo confirmó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) a través de un comunicado oficial.

La SRE detalló que, a pesar de la cancelación, Sheinbaum mantiene su agenda programada para este martes 17 de junio, la cual incluye reuniones bilaterales con el primer ministro canadiense Mark Carney, así como con líderes de Alemania, India y la Unión Europea. “Hacemos votos por la paz y para que la situación en Medio Oriente no se agudice”, expresó la Cancillería.

La decisión de Trump de retirarse del G7 antes de su conclusión fue comunicada por la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, quien señaló que el mandatario consideró urgente atender personalmente la situación en Medio Oriente. “El presidente tuvo un gran día en el G7, firmó un importante acuerdo comercial con el Reino Unido, pero debido a los acontecimientos en Oriente Medio, se irá esta noche tras la cena con los jefes de Estado”, declaró.

Trump había anunciado horas antes en su red social Truth Social una advertencia a la población de Teherán, sugiriendo una evacuación inmediata de la capital iraní ante el riesgo de un posible ataque israelí. “Irán debería haber firmado el ‘acuerdo’ que les dije que firmaran. Qué vergüenza y qué desperdicio de vidas humanas”, escribió. Además, reiteró su postura de que “Irán no puede tener un arma nuclear. ¡Lo dije una y otra vez!”.

El retiro del presidente estadounidense supone también la cancelación de su esperada reunión con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, y modifica los cálculos geopolíticos de los líderes presentes en Canadá, que centraban buena parte de sus esfuerzos en dialogar con Trump sobre comercio y seguridad internacional.

En el caso de México, la cancelación deja en suspenso una cita clave en medio de tensiones migratorias y comerciales, y marca un giro inesperado en lo que prometía ser uno de los momentos más significativos de la primera participación de Sheinbaum en una cumbre del G7.