El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, declaró este jueves que su Gobierno estaba preparado para enfrentar el impacto del ciclón Otis, que sorprendió a todos por su rápida intensificación de tormenta tropical a huracán categoría 5 en menos de 12 horas. El huracán Otis dejó al menos 27 personas fallecidas y causó graves daños en diversas zonas.

Durante una rueda de prensa, López Obrador expresó su reconocimiento a las Fuerzas Armadas por su actuación desde el inicio del evento climático. Sin embargo, el mandatario destacó que el fenómeno fue "excepcional" y "inesperado". Otis pasó de tener vientos de 64 km/h a 270 km/h en menos de 12 horas, un hecho calificado como "atípico" y "poco probable" que no se había previsto en los pronósticos internacionales.

El presidente criticó a sus "adversarios" por cuestionar la respuesta de su Gobierno, ya que en 2021 se eliminó el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) como parte de una reforma de austeridad. A pesar de esto, López Obrador afirmó que el Gobierno tiene recursos garantizados, incluyendo un fondo de emergencias con 18 mil millones de pesos.

López Obrador también anunció la movilización de 10,000 elementos de las Fuerzas Armadas y 1,000 funcionarios para llevar a cabo un censo de los daños causados por el huracán Otis. Se comprometió a implementar un programa de construcción y mejoramiento de viviendas para ayudar a los afectados, incluyendo pequeños comercios con palapas en la playa, que han perdido sus medios de vida.

El ciclón Otis ha causado numerosos daños, incluyendo cierres de carreteras, daños en un hospital del IMSS en Acapulco y la destrucción del 80% de los hoteles en la costa, además de dejar sin electricidad a más de medio millón de personas y cortar las comunicaciones en la Costa Sur de Guerrero.