El presidente Andrés Manuel López Obrador desestimó el incidente ocurrido en Chiapas, donde un grupo de aproximadamente 8 personas encapuchadas interceptó a la candidata presidencial Claudia Sheinbaum, calificándolo de "propaganda" y "montaje".

Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, López Obrador expresó su escepticismo sobre el evento, sugiriendo que podría tratarse de una estrategia de propaganda previa a las elecciones del 2 de junio.

"Ayer, un grupo de personas encapuchadas detuvo la camioneta en la que se trasladaba Claudia Sheinbaum. Es muy probable que sea propaganda y entonces sí es muy probable que sea un montaje", declaró el presidente.

López Obrador cuestionó la autenticidad del incidente, señalando la conveniencia de la vestimenta y la falta de armas en los encapuchados. Además, resaltó la presencia de elementos de seguridad en el convoy de Sheinbaum durante el episodio.

"No creo que sea algo grave, es lograr este propósito, ya hasta yo mismo estoy contribuyendo en el amarillismo, la propaganda", agregó el mandatario.

Por su parte, Sheinbaum minimizó el incidente y afirmó que se trató de una expresión del sentir sobre la inseguridad en la zona, la cual aseguró que su gobierno está atendiendo y seguirá haciéndolo.

El suceso ha generado controversia y debates sobre su autenticidad y posible trasfondo político en el contexto de la campaña electoral.