El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció que celebrará una fiesta en su última conferencia mañanera en Palacio Nacional, la cual tendrá lugar el próximo lunes 30 de septiembre.

Durante su conferencia matutina en el Salón Tesorería, López Obrador invitó a los reporteros que asisten regularmente a sus ruedas de prensa a prepararse para el festejo de despedida.

"Vamos a despedirnos, va a ser fiestón, se van preparando", expresó el mandatario, acompañado de un gesto festivo con la mano.

López Obrador detalló que su última mañanera será el lunes 30 de septiembre, ya que el 1 de octubre entregará la banda presidencial a su sucesora, Claudia Sheinbaum. El presidente comentó que ese día habrá una sesión breve con solo "una o dos preguntitas", seguida por la celebración.

El presidente dio un adelanto del menú que se servirá en la fiesta de despedida, incluyendo una variedad de platillos típicos mexicanos.

"Chocolate, café, tortas de lechón, tamales, cochinita pibil, zacahuil, unas tortas de chilaquil, las guajolotas, de todo. Picadas también, tlacoyos. ¡Ah sí! También unas tlayudas con asiento para que amarre bien", explicó, desatando risas entre los periodistas presentes.

Este anuncio marca el inicio de los preparativos para el cierre de un ciclo de conferencias mañaneras que han sido una característica distintiva de la presidencia de López Obrador. El presidente ha utilizado estas conferencias diarias para comunicar directamente con el pueblo, responder preguntas de la prensa y abordar una amplia gama de temas nacionales e internacionales.

El próximo 30 de septiembre, la conferencia mañanera no solo será un espacio para la reflexión y la despedida, sino también una celebración de los logros y desafíos enfrentados durante el sexenio de López Obrador.

En sus últimas semanas como presidente, López Obrador ha expresado su gratitud hacia el pueblo mexicano y ha manifestado su intención de retirarse a su finca en Palenque, Chiapas, después de entregar la banda presidencial a Claudia Sheinbaum.

La fiesta en su última mañanera será una oportunidad para que el presidente celebre junto a los periodistas que han seguido su administración de cerca, marcando el fin de una era y el inicio de una nueva etapa para México bajo el liderazgo de Sheinbaum.

Con este gesto, López Obrador busca cerrar su mandato con una nota festiva, dejando un legado de comunicación directa y apertura con los medios y la ciudadanía.