El líder del Cártel de Sinaloa, Ismael "El Mayo" Zambada, se entregó a las autoridades de Texas, Estados Unidos, tras haber pasado los últimos años prófugo de la justicia. Conocido como uno de los principales generadores de violencia en México y Estados Unidos, Zambada ahora está bajo custodia estadounidense, según informaron a Reuters dos fuentes familiarizadas con la operación.

Zambada, quien fundó el Cártel de Sinaloa junto con el encarcelado Joaquín "El Chapo" Guzmán, enfrenta una larga lista de acusaciones relacionadas con el narcotráfico y el crimen organizado en Estados Unidos. En febrero, fiscales federales estadounidenses acusaron a Zambada de conspiración para fabricar y distribuir fentanilo, una sustancia que los funcionarios estadounidenses consideran la principal causa de muerte entre los estadounidenses de entre 18 y 45 años.

La historia criminal de Zambada se remonta a los años ochenta, cuando el desarrollo urbano se disparó en Jalisco debido a inversiones millonarias de la organización delictiva conocida como el Cártel de Guadalajara. Liderada por Miguel Ángel Félix Gallardo, Rafael Caro Quintero y Ernesto Fonseca Carrillo, esta red de tráfico de drogas internacional sentó las bases del narcotráfico en México.

Fue en este contexto que Joaquín "El Chapo" Guzmán e Ismael "El Mayo" Zambada comenzaron su carrera delictiva, inicialmente como trabajadores del Cártel de Guadalajara. Tras el asesinato del agente de la DEA Enrique "Kiki" Camarena por Caro Quintero, la amistad entre Guzmán y Zambada se fracturó, especialmente después del asesinato de uno de los hijos de Guzmán.

Juntos, Guzmán y Zambada fundaron el Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones delictivas transnacionales más peligrosas y poderosas del mundo. Aunque Guzmán ha estado encarcelado desde 2016, Zambada continuó operando en la sombra hasta su reciente entrega a las autoridades estadounidenses.

La entrega de Ismael "El Mayo" Zambada representa un golpe significativo para el Cártel de Sinaloa y plantea preguntas sobre el futuro de la organización. Su captura podría desencadenar una serie de eventos que afecten tanto al narcotráfico en México como a las operaciones del cártel en Estados Unidos.

El gobierno de Estados Unidos ha intensificado sus esfuerzos para combatir el tráfico de fentanilo y otras drogas, y la detención de Zambada podría ser un paso importante en esta lucha. Sin embargo, también destaca la continua problemática del narcotráfico y la violencia asociada en ambas naciones.

Con la extradición y juicio de Zambada en Estados Unidos, se espera que se revele más información sobre las operaciones del Cártel de Sinaloa y sus vínculos con otros grupos delictivos. La justicia estadounidense tendrá ahora la tarea de procesar a uno de los narcotraficantes más buscados del mundo, en un caso que será seguido de cerca por observadores de todo el mundo.