La presidenta Claudia Sheinbaum lamentó este martes el fallecimiento de José “Pepe” Mujica, ex presidente de Uruguay, destacando su legado como una figura de profunda sabiduría y compromiso con las causas sociales. Durante su conferencia matutina, Sheinbaum evocó con admiración la capacidad de Mujica para expresar ideas complejas con palabras sencillas, siempre al servicio de los más vulnerables.

“Palabras muy sencillas y breves, decir pensamientos muy profundos, siempre en beneficio de los pobres, de los desposeídos, de los que menos tienen... esa sabiduría muy pocos la tienen. Y ese, pues, es un legado que nos deja por siempre”, expresó la mandataria, sumándose a las múltiples voces internacionales que han rendido tributo al líder uruguayo, fallecido el lunes a los 89 años.

Mujica, ampliamente reconocido por su vida austera, su pensamiento ético y su lucha constante por la justicia social, fue una figura de referencia para los movimientos progresistas de América Latina. Su estilo directo, alejado de los privilegios del poder, y su enfoque filosófico sobre la libertad, el consumo y la política, marcaron una época en el continente.

Sheinbaum subrayó que el pensamiento de Mujica continuará influyendo en quienes creen en la política como herramienta de transformación social: “Nos deja un ejemplo vivo de humildad y coherencia. Un referente que trasciende fronteras”.