

En un encuentro cuidadosamente planificado y rodeado de estrictas medidas de seguridad, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo recibió este miércoles 3 de agosto de 2025 al secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, en Palacio Nacional, marcando así el inicio formal de una nueva etapa en las relaciones bilaterales entre ambos países. La visita, considerada clave en el actual contexto regional, se centra en tres ejes fundamentales: seguridad, migración y comercio, bajo el principio de cooperación sin subordinación.
Rubio, quien arribó al recinto poco antes de las 10:00 horas acompañado por el canciller Juan Ramón de la Fuente, sostuvo una reunión privada con la mandataria mexicana en la que se abordaron los avances recientes en materia de seguridad nacional y fronteriza. De acuerdo con fuentes cercanas a la presidencia, la delegación mexicana presentó una evaluación detallada de la estrategia de seguridad integral que se ha venido implementando desde el inicio del sexenio y en la cual han existido espacios de colaboración técnica y operativa con agencias estadounidenses.
“No habrá firma de un acuerdo”, aclaró Sheinbaum en su conferencia matutina previa al encuentro, “porque eso implicaría compromisos formales en el ámbito de política exterior”. En cambio, precisó que ambas partes dialogarán en torno a un programa de cooperación en temas de seguridad fronteriza y aplicación de la ley, lo que permitirá continuar el trabajo conjunto bajo un marco respetuoso de las soberanías nacionales.
Uno de los temas prioritarios para la mandataria fue la situación de los mexicanos y mexicanas que viven en Estados Unidos, un asunto que, si bien no recae directamente bajo la competencia del Departamento de Estado, fue incluido por Sheinbaum en la agenda como una prioridad humanitaria y diplomática. A su vez, se tocaron puntos relacionados con el comercio bilateral, particularmente en el contexto del T-MEC y de la reconfiguración de cadenas productivas regionales.
El tono del encuentro fue calificado por ambas delegaciones como cordial y constructivo, en línea con la visión compartida de fortalecer la cooperación estratégica sin diluir las identidades y prioridades propias de cada país. Sheinbaum reiteró que México busca ser un socio confiable, pero no un actor subordinado, y subrayó que el diálogo con Estados Unidos debe estar fundado en respeto mutuo, corresponsabilidad y objetivos comunes.
Se espera que Marco Rubio ofrezca una conferencia de prensa posterior para exponer los principales resultados del encuentro, mientras que el gobierno mexicano emitirá un comunicado con los acuerdos alcanzados. Por ahora, la reunión representa un primer paso simbólico y político hacia la consolidación de un nuevo esquema de entendimiento entre los dos países más influyentes del continente.