La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que no existen indicios de que el crecimiento en el envío de remesas desde Estados Unidos hacia México esté vinculado con operaciones de lavado de dinero, y subrayó que dicho fenómeno responde a la generosidad y solidaridad de millones de mexicanos que viven en el extranjero.
“No tenemos ningún indicio que esto tenga que ver con lavado de dinero… Estos son los paisanos, 40 millones de mexicanos y 12 a 15 millones todos los meses están ayudando a sus familias. Es algo de reconocer, de una generosidad extraordinaria”, declaró la mandataria durante su conferencia matutina.
Señaló que las remesas representan un acto de apoyo legítimo y continuo por parte de la comunidad migrante, que se ha convertido en un pilar económico para miles de hogares en el país. Aclaró que, en caso de detectarse alguna irregularidad, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y las autoridades correspondientes en Estados Unidos mantienen canales de coordinación para investigar y sancionar cualquier posible caso de operaciones ilícitas.
Sheinbaum enfatizó que las remesas son un fenómeno histórico que refleja los valores de cercanía y compromiso de la comunidad mexicana en el exterior, y que no deben ser estigmatizadas sin evidencia.
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