El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que una ruptura en las relaciones económicas y comerciales entre México y Estados Unidos sería imposible debido a la interdependencia entre ambas naciones. Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, el mandatario subrayó que tal situación provocaría caos en ambos países, destacando la importancia de la cooperación y el fortalecimiento de la producción en Norteamérica.

López Obrador hizo énfasis en que México y Estados Unidos están profundamente ligados en términos económicos y comerciales, y cualquier ruptura sería catastrófica para ambas economías. "Nos complementamos, hay muchos bienes que ellos consumen y se producen en México, y también nosotros necesitamos de las inversiones y la tecnología de EE.UU.", declaró. Además, subrayó la importancia de los alimentos, señalando que México aún no es autosuficiente en productos como el maíz amarillo.

El presidente destacó el superávit agroalimentario de México en la primera mitad de 2024, que ascendió a 5 mil 757 millones de dólares, lo que representa un aumento interanual del 11.15%. A esto se suma un crecimiento del 4.48% en exportaciones agropecuarias y agroindustriales, alcanzando los 28 mil 607 millones de dólares, según datos de la Secretaría de Agricultura.

López Obrador también destacó la necesidad de aumentar la producción en Norteamérica para reducir la dependencia de importaciones de productos que podrían fabricarse en la región. En este sentido, mencionó la balanza comercial desfavorable con China, apuntando que México compra más productos de ese país de los que exporta.

“Hay que buscar un justo medio en las relaciones económicas comerciales de México con el mundo, y con Estados Unidos tiene que ser con respeto a las soberanías", enfatizó.

López Obrador reafirmó que la relación entre México y Estados Unidos es fundamental para el bienestar económico de ambas naciones. Aunque reconoció los desafíos en la producción interna de ciertos productos, llamó a fortalecer la cooperación en Norteamérica y equilibrar las relaciones comerciales globales, especialmente con China.