México buscará mejorar su posición en el índice global de innovación mediante la creación de un Consejo Consultivo para la innovación y una estrategia destinada a incrementar y comercializar patentes, anunciaron autoridades durante un evento que celebró a los inventores nacionales.

Actualmente, México ocupa el puesto 74 de 133 economías en el índice global de innovación, a pesar de ser la duodécima economía más grande del mundo y el socio comercial más importante de Estados Unidos. La iniciativa liderada por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) tiene como objetivo elevar esta posición y promover una mayor producción y comercialización de patentes.

Santiago Nieto, director general del IMPI, destacó que el país ha registrado un récord histórico de 657 patentes este año, pero reconoció que esta cifra es aún insuficiente frente al potencial de innovación del país. A modo de comparación, China ha gestionado más de 1.5 millones de solicitudes de patentes, mientras que en México, de las 20 mil patentes registradas, solo un 3 por ciento corresponden a inventores mexicanos.

Para abordar este desafío, Nieto anunció que el gobierno está trabajando en la creación de un Consejo Consultivo, que incluirá a empresarios, académicos y científicos. Este consejo se encargará de articular políticas que aceleren tanto el registro de patentes como su posterior comercialización.

Una de las medidas propuestas es revisar el proceso de aprobación de patentes, actualmente con un plazo de cinco años, con el fin de acercarse al estándar de países como China, donde el trámite se realiza en aproximadamente 15 meses.

Un problema crucial señalado por las autoridades es la baja comercialización de las patentes mexicanas. Según datos del IMPI, de las 657 patentes registradas en 2024, solo 10 han derivado en productos comercializados. Esto pone de relieve la necesidad de fortalecer los vínculos entre la investigación y el mercado, para convertir las invenciones en inversiones productivas.

El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, destacó la importancia de cambiar la mentalidad en torno al desarrollo tecnológico en México. Criticó la idea de que es más sencillo comprar tecnología extranjera que desarrollarla localmente y enfatizó la necesidad de impulsar patentes con impacto social y económico, particularmente en sectores como la agroindustria y las tecnologías aplicadas.

Ebrard recordó ejemplos de éxito, como la vacuna mexicana contra el COVID-19 y el sistema de alerta sísmica, y subrayó que la falta de autogestión tecnológica no solo afecta la economía del país, sino también su seguridad. “No es solo un tema de cómo pensamos el desarrollo del país, sino tiene que ver con nuestra seguridad y nuestra riqueza”, señaló.

Por su parte, Altagracia Gómez Sierra, coordinadora del Consejo Asesor de Desarrollo Económico Regional, celebró la creciente participación de las mujeres en el ámbito de la innovación. También destacó la importancia de estrechar la colaboración entre la academia, el sector privado y el Gobierno para garantizar que las invenciones mexicanas se conviertan en proyectos comerciales que impulsen el desarrollo económico del país.

Con estas medidas, México busca fortalecer su ecosistema de innovación, generando un impacto positivo en su competitividad a nivel global y promoviendo la creación de productos y soluciones tecnológicas de alto valor agregado.