Joe Biden otorga perdón presidencial a sus familiares y colaboradores minutos antes de dejar la Casa Blanca

Antes de entregar el poder a Donald Trump, Joe Biden otorgó un perdón total e incondicional a varios miembros de su familia y colaboradores clave, incluidos Anthony Fauci y el general retirado Mark Milley.
En una acción sin precedentes, Joe Biden firmó indultos preventivos para miembros de su familia y figuras clave de su administración minutos antes de concluir su mandato como presidente de Estados Unidos. Entre los perdonados se encuentran sus hermanos James, Valerie y Francis Biden, así como los esposos de los dos primeros, Sara Biden y John Owens.
El perdón, descrito como "total e incondicional," abarca cualquier acto no violento cometido por los beneficiarios entre 2014 y el día de hoy. James Biden, hermano del expresidente y figura empresarial con vínculos cercanos a su administración, había sido objeto de investigaciones por parte de los republicanos en el Congreso, quienes lo acusaron junto a Hunter Biden, hijo de Joe Biden, de presunto tráfico de influencias.
Además de sus familiares, Biden extendió los indultos a figuras de alto perfil, como Anthony Fauci, principal estratega contra la pandemia de COVID-19, y al general retirado Mark Milley, quien fungió como jefe del Estado Mayor Conjunto. También fueron perdonados los integrantes del comité que investigó el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021.
La decisión fue anunciada momentos antes del mediodía, justo cuando Donald Trump se preparaba para asumir la presidencia como el mandatario número 47 de Estados Unidos.
Estos indultos se producen en un momento de intensa polarización en Washington, donde los republicanos, que ahora controlan el Congreso, han prometido investigar a fondo a la familia y colaboradores del expresidente Biden. La medida podría interpretarse como un intento de proteger a sus allegados ante posibles acciones legales en una nueva era de confrontación política.
Con esta acción, Joe Biden cierra su capítulo como líder del país con una controversia que, sin duda, generará intensos debates en el ámbito político y legal de Estados Unidos.