Sheinbaum responde a bloqueo de la CNTE: “Hay diálogo permanente, no veo por qué cerrar Palacio Nacional”

La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo afirmó este martes que su gobierno mantiene un diálogo permanente con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), luego del bloqueo a los accesos de Palacio Nacional, que impidió el ingreso de medios de comunicación y personal previo a la conferencia matutina. La mandataria subrayó que no existe justificación para cerrar el recinto, ya que el Ejecutivo federal no ha cancelado ninguna mesa de negociación.
“Hay diálogo, ayer mismo se reunieron con la Secretaría de Gobernación, el secretario de Educación Pública y su equipo; también estuvo presente la Secretaría de Hacienda a través del área de pensiones. No veo por qué cerrar las puertas de Palacio”, declaró.
Sheinbaum confirmó que se está organizando una nueva reunión con la CNTE para este viernes, en la que participará el gabinete federal, y aclaró que no es imprescindible que ella esté presente para que las negociaciones avancen. “Lo importante es que haya soluciones y voluntad de ambas partes”, dijo.
La CNTE ha mantenido su plantón en el Zócalo capitalino y exige una reunión directa con la presidenta para abordar demandas como la abrogación de la reforma educativa, aumentos salariales reales, mejoras a los sistemas de pensiones y jubilaciones, así como la reinstalación de docentes cesados. El cierre de los accesos al Palacio Nacional, ocurrido este martes, fue una acción de presión para forzar dicho encuentro.
Sheinbaum, sin embargo, insistió en que el canal de diálogo está abierto y activo, con reuniones técnicas en curso y presencia de los principales responsables de cada área. “Hay disposición para escuchar y resolver, pero el país necesita que las instituciones funcionen. Cerrar Palacio no es el camino”, expresó.
A pesar del bloqueo, la conferencia matutina se llevó a cabo con normalidad al interior, aunque con restricciones de acceso. La situación pone a prueba la capacidad del nuevo gobierno para administrar conflictos sindicales heredados, especialmente con un sector como el magisterio disidente que históricamente ha confrontado a las administraciones federales.
El llamado de Sheinbaum a mantener el cauce institucional y evitar acciones de fuerza busca contener la escalada del conflicto sin romper el diálogo. La cita del viernes será clave para medir si el gabinete logra construir acuerdos de fondo o si, por el contrario, el desencuentro se intensifica con nuevas manifestaciones en el espacio público.
Por ahora, el mensaje es firme pero abierto: el diálogo no está roto, pero tampoco condicionado a la presión callejera.