AMLO rechaza “Concertacesión” en Reforma al Poder Judicial
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que no aceptará una "concertacesión" en el tema de la reforma al Poder Judicial, una práctica que recuerda a las negociaciones políticas del sexenio de Carlos Salinas de Gortari.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, López Obrador fue enfático al declarar que no es necesaria la renuncia de la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, a cambio de una reforma judicial "descafeinada".
“No, no, no, eso es del tiempo de la corrupción y del autoritarismo, no deben de haber ese tipo de negociaciones”, señaló. “No, no, no, es que no es una concertacesión, como era la costumbre en la época de Salinas, no, no, no, no, no, que sea de conformidad con la Constitución, de conformidad con la ley”.
El presidente subrayó que el proceso para la reforma está claramente definido por la Constitución. “El presidente, el titular del Ejecutivo, tiene facultad de enviar al Congreso una reforma a la Constitución, ese es el procedimiento. Ya la enviamos, entonces el Congreso revisa, analiza, discute y aprueba en su caso la reforma”, explicó.
Rechazó cualquier idea de una reforma “descafeinada” o a medias, puntualizando en tono irónico: “No, no, no, qué descafeinado ni que nada quién toma café descafeinado”.
López Obrador destacó que la renuncia de la ministra Piña Hernández no solucionaría la crisis que enfrenta el Poder Judicial. “Ella llega ahí, desde luego tiene procedimientos que uno no puede aceptar o compartir, pero no sólo es ella, es una crisis del Poder Judicial. ¿Y cómo se enfrenta una crisis, una decadencia? Pues con una reforma, con una transformación, no parchando”, expresó.
Recordó que el expresidente Ernesto Zedillo en su momento reemplazó a los ministros, pero mediante negociaciones, una práctica que López Obrador considera ya no debe seguirse. “Eso se podría, pero no debe seguirse con esas prácticas, eso no ayuda”, afirmó.
El presidente mexicano reiteró que “no hace falta que renuncie nadie” en el contexto de la reforma judicial que actualmente se discute en foros organizados por el Congreso de la Unión. Enfatizó la importancia de un análisis profundo y diagnóstico adecuado para avanzar en la reforma.
“Es nada más que continúe el debate sobre la necesidad de la reforma, hacer un buen análisis, un buen diagnóstico, ya nosotros presentamos una iniciativa de ley, que se revise, que se vean los tiempos, los procedimientos que se deben aplicar, que se fijen los tiempos para la elección y que se inicie el proceso con una convocatoria en donde ya pueden inscribirse los aspirantes de acuerdo a los requisitos”, comentó.
López Obrador defendió la idea de que la mejor forma de resolver los problemas es a través de la democracia. “Para no equivocarnos lo mejor es preguntar y si se aprueba una reforma para renovar el Poder Judicial de manera ordenada, sin excluir a nadie, pero que sea el ciudadano, que sea el pueblo el que elija a los jueces, magistrados y ministros, vamos a avanzar mucho, muchísimo”, subrayó.
Enfatizó que, con esta reforma, los jueces, magistrados y ministros se sentirán libres y no estarán comprometidos con ningún grupo de interés, político o potentado. “Lo va a elegir el pueblo”, concluyó.
Esta postura de López Obrador marca un claro rechazo a las viejas prácticas políticas y subraya su compromiso con una transformación profunda y democrática del sistema judicial en México.