Aprueban reformas constitucionales en bienestar social: un paso hacia la justicia y la dignidad en México
La presidenta de la Comisión de Bienestar, Andrea Chávez, presentó el dictamen de las reformas a los artículos 4° y 27 de la Constitución, un acto que calificó como de "justicia social, fraternidad y amor incondicional al pueblo de México". Las modificaciones buscan garantizar derechos esenciales como el acceso a una vivienda digna, pensiones universales para adultos mayores y personas con discapacidad, así como apoyos para los trabajadores del campo y pescadores.
Chávez destacó la relevancia histórica de estas reformas, señalando que van más allá de un acto legislativo, ya que representan un cambio en la protección y respeto hacia los grupos históricamente vulnerados. “Estas reformas no son sólo palabras, sino compromisos concretos del Estado para asegurar la dignidad de cada mexicana y mexicano”, afirmó.
Entre los objetivos centrales del dictamen, Chávez subrayó la garantía del derecho a una vivienda adecuada para todos los ciudadanos, lo que implicará una tenencia segura, accesibilidad para personas con discapacidad, y acceso a servicios básicos y oportunidades de empleo. Este enfoque, además de cubrir necesidades básicas, busca respetar la identidad cultural de los distintos pueblos y comunidades del país.
Otra de las reformas clave es el otorgamiento de pensiones no contributivas a personas con discapacidad menores de 65 años, y a adultos mayores de 65 años. Este programa, lanzado en 2019, ha beneficiado a más de 1.6 millones de personas, y se espera que esta reforma constitucional consolide el apoyo a la población más vulnerable del país, garantizando que su acceso a este derecho no dependa de voluntades políticas.
En el sector agrícola, la reforma al artículo 27 constitucional asegura apoyo económico directo a campesinos y pescadores de pequeña escala, incluyendo fertilizantes gratuitos y precios de garantía para productos básicos. La intención, según destacó Chávez, es mejorar las condiciones de vida de los trabajadores rurales, fortalecer la seguridad alimentaria y reconocer el valor de su labor para el desarrollo del país.
El dictamen también ordena al Estado destinar los recursos presupuestarios necesarios de forma progresiva para cumplir estos compromisos, sin que los montos asignados puedan disminuir en términos reales año con año.
“Con estas reformas construimos un México fraterno, justo y digno para todas y todos”, concluyó Chávez, quien enfatizó que esta es una apuesta clara por la dignidad y los derechos de los ciudadanos, desde los más jóvenes hasta los adultos mayores, y un reconocimiento para aquellos trabajadores del campo y del mar que sustentan la alimentación del país.