La presidenta Claudia Sheinbaum rechazó este lunes los actos de violencia registrados durante la marcha conmemorativa por la matanza del 2 de octubre de 1968, ocurrida el pasado fin de semana en la Ciudad de México. Señaló que los responsables de las agresiones fueron integrantes del llamado bloque negro, quienes —afirmó— “buscaban la provocación”.
Durante su conferencia matutina, la mandataria federal destacó que, pese a los disturbios, la policía capitalina actuó con contención y no cayó en provocaciones, evitando una confrontación directa con los manifestantes más agresivos.
“Pueden no estar de acuerdo con el gobierno, pero esta agresión a las personas periodistas tiene que revisarse y la fiscalía tiene que ver si hay identificación de alguna de las personas”, expresó Sheinbaum, al referirse a los ataques contra medios de comunicación durante la movilización.
La presidenta hizo un llamado a mantener las manifestaciones pacíficas y cuestionó los fines que persiguen estos grupos radicales. “La pregunta que tenemos que hacernos todos los mexicanos es: ¿qué ganan estos grupos?, ¿qué buscan? Porque los extremos se juntan, supuestamente muy radicales”, indicó.
Finalmente, reiteró que se debe garantizar el derecho a la protesta, pero sin permitir actos violentos que vulneren a terceros o a la prensa, y pidió a las autoridades judiciales investigar a los posibles responsables de las agresiones.
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