Brenda Ríos rinde informe legislativo y declara la guerra a la indiferencia: “En 2027, el gobierno cambiará de manos”

La diputada de Morena, Brenda Ríos, rindió su informe de trabajo legislativo con un mensaje claro: su compromiso es con el pueblo de Chihuahua y no con los intereses del poder. En un acto cargado de simbolismo, emotividad y firmeza, la legisladora declaró que “en 2027, el gobierno cambiará de manos: de ellos a ustedes, los chihuahuenses”.

El evento comenzó con la participación musical de Francisco Rey, cuya presentación logró que la diputada subiera al escenario a cantar dos temas, lo que provocó aplausos y entusiasmo entre los asistentes. Posteriormente, se proyectó un video resumen de su labor en el Congreso del Estado, destacando que en el último año impulsó 14 iniciativas de ley, participó en 20 puntos de acuerdo y forma parte de cinco comisiones, además de integrar comisiones especiales como la del relleno sanitario y la de fraccionamientos irregulares.

Durante su discurso, un grupo levantó pancartas en su contra, lo que generó una respuesta inmediata de sus simpatizantes con cartulinas de apoyo, en un momento tenso que no detuvo su intervención. Ríos respondió con contundencia: “Vine a usar la ley como herramienta para ponerles límite”.

En su mensaje, expuso la existencia de dos proyectos de ciudad: uno “donde se permiten negocios en lo oscurito” que resultan en servicios públicos deficientes y fraccionamientos inseguros, y otro, el de la gente común que trabaja y paga impuestos. Afirmó que su informe representa la rendición de cuentas a este segundo grupo, “los que viven las consecuencias”.

Detalló que su agenda legislativa se ha centrado en tres ejes: la vida, la mente y la ciudad. Recordó las reformas impulsadas tras el colapso de un muro de contención, para sancionar la corrupción inmobiliaria como delito, y mencionó iniciativas para fortalecer la atención a la salud mental y endurecer penas contra la violencia de género.

Sobre el desarrollo urbano, propuso mecanismos que garanticen estudios técnicos serios y consultas vecinales antes de aprobar fraccionamientos u obras. “Si una firma mata, esa firma tiene que tener nombre, cargo y sanción”, dijo.

Uno de los momentos más relevantes del informe fue su posicionamiento sobre el crédito millonario del Gobierno Municipal, que inicialmente fue rechazado por errores administrativos. Explicó que votó a favor de retomarlo, pero con la condición de crear una comisión de seguimiento obligatoria. “Sí a los recursos para la ciudad, no a los cheques en blanco”, puntualizó.

Ríos enfatizó que su oficina legislativa se ha convertido en un espacio donde la ciudadanía puede ser escuchada. Ha acompañado denuncias de fraudes, abusos de autoridad y problemas ambientales. Subrayó acciones como reforestaciones y campañas de “regalos verdes” en barrios marginados, bajo la convicción de que “también hay derecho a respirar”.

Antes de concluir, dejó claro que no está en el Congreso para complacer a nadie: “No vine a ser una diputada de palabras suaves”. Recalcó que su estilo ha incomodado, pero está ahí para servir al pueblo, no para aplaudir al poder. “Mientras tenga un micrófono en el Congreso, lo voy a usar para darle voz a los chihuahuenses”, afirmó.

El acto cerró con aplausos, gritos de apoyo y la promesa de que su lucha no termina: “Esto apenas empieza”.