Guterres advierte sobre la crisis global: "El estado de nuestro mundo es insostenible"
En el marco de la apertura de la semana de Alto Nivel de las Naciones Unidas, el secretario general de la ONU, António Guterres, lanzó una advertencia contundente sobre el estado del mundo, afirmando que "es insostenible" y que "no podemos seguir así". En su discurso, destacó tres problemas clave que, según él, están deteriorando el orden global: la impunidad, la desigualdad y la incertidumbre provocada por el cambio climático y la inteligencia artificial descontrolada.
Guterres denunció el creciente número de países que violan la carta de la ONU y las leyes internacionales sin sufrir consecuencias, una tendencia que, dijo, afecta tanto a Oriente Medio, Europa y África. Mencionó el conflicto en Gaza, que está por cumplir un año con un saldo devastador de 41,300 palestinos muertos. Sin nombrar directamente a Israel, cuestionó a la comunidad internacional sobre el futuro de un Estado que incluye a "un gran número de palestinos sin libertad, derechos ni dignidad", arrancando aplausos al recordar que "nada puede justificar el castigo colectivo en Gaza".
El secretario general también subrayó la creciente desigualdad económica, señalando que el 1% de la población mundial posee el 43% de los activos financieros. En contraste, dos tercios de los 75 países más pobres están en peor situación que hace cinco años. Guterres criticó a los gobiernos que otorgan beneficios fiscales a los ultrarricos en lugar de invertir en salud, educación y protección social, lo que parece ser una indirecta a naciones como Estados Unidos.
Guterres alertó sobre los peligros de un futuro incierto, especialmente en lo que respecta al cambio climático y la inteligencia artificial (IA). Si bien destacó que el fin de los combustibles fósiles es una necesidad global, criticó que las grandes compañías petroleras sigan beneficiándose de subsidios, mientras los ciudadanos sufren las consecuencias del deterioro ambiental.
En cuanto a la IA, advirtió sobre el creciente poder de unas pocas compañías tecnológicas y la falta de supervisión, lo que podría llevar a lo que llamó “la Gran Fractura” global, donde el control sobre esta tecnología determina la dirección futura del planeta, ya sea hacia más libertad o más desigualdad.
A pesar del sombrío diagnóstico, Guterres insistió en que los retos que enfrenta el mundo no son irresolubles, pero subrayó la urgencia de tomar medidas inmediatas para evitar que la situación empeore.