

En una conferencia de prensa celebrada este viernes 19 de diciembre de 2025 en Washington D.C., el secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, destacó los avances recientes del Gobierno de México en materia de seguridad, al tiempo que subrayó la persistencia de desafíos graves en la región, atribuibles principalmente a organizaciones criminales trasnacionales.
Rubio reconoció una mayor disposición por parte de las autoridades mexicanas para colaborar con Estados Unidos, señalando que “el Gobierno de México está haciendo más en este momento en el tema de seguridad que jamás en su historia”. Sin embargo, matizó que aún queda un largo camino por recorrer para frenar de manera efectiva la expansión de los cárteles y otras redes criminales.
El funcionario norteamericano advirtió que los llamados “grupos terroristas criminales” representan la amenaza más seria para el hemisferio occidental. En su diagnóstico, estas organizaciones no solo operan en México, sino que han enraizado su presencia en países como Colombia, Ecuador y en gran parte de Centroamérica, generando inestabilidad regional. “Es la raíz de la violencia en Ecuador, en México, en todo Centroamérica… la amenaza más primordial de la región”, afirmó.
Rubio también se refirió a los retos de cooperación con otros gobiernos latinoamericanos, haciendo una crítica directa al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela. Denunció que grupos armados como el ELN y facciones disidentes de las FARC operan con libertad desde territorio venezolano, en complicidad con el gobierno de Caracas. “Tenemos un régimen ilegítimo que coopera abiertamente con elementos criminales”, declaró, agregando que Venezuela se ha convertido en una plataforma para el tráfico de drogas hacia Estados Unidos a través del Caribe.
La postura de Washington, según Rubio, se orienta a garantizar la seguridad del hemisferio, priorizando los intereses estratégicos de Estados Unidos ante las crecientes amenazas transnacionales. Al ser cuestionado sobre una posible intervención militar o una estrategia para derrocar a Maduro, evitó declaraciones directas, afirmando que “lo que el Gobierno de Trump está haciendo es proteger los intereses de Estados Unidos”.
Rubio tampoco quiso precisar si una eventual operación armada requeriría autorización del Congreso, limitándose a señalar que “no ha pasado nada que nos obligue a solicitar la aprobación del Congreso”.
Las declaraciones del jefe de la diplomacia estadounidense delinean un panorama en el que se reconoce el esfuerzo de países aliados como México, pero también se refuerza la narrativa de una amenaza regional que justificaría una postura más activa —y posiblemente más intervencionista— por parte de Estados Unidos en América Latina.











