

El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, anunció este miércoles que la entidad será pionera en la implementación de los Polos del Bienestar, uno de los ejes estratégicos del Plan México impulsado por el gobierno federal. En esta primera etapa, se contempla una inversión de mil millones de pesos para el desarrollo de infraestructura público-privada orientada al crecimiento regional con enfoque social.
Durante su intervención en la conferencia matutina presidencial, Ramírez Bedolla destacó que Michoacán no solo se suma al plan, sino que lidera su implementación con proyectos concretos. “Esta inversión representa el punto de partida de una transformación productiva que articula desarrollo económico y bienestar social”, subrayó.
El mandatario recordó que esta inversión se suma a los más de 13 mil millones de pesos anunciados recientemente por la presidenta Claudia Sheinbaum para el puerto de Lázaro Cárdenas y el desarrollo del parque industrial Bajío, identificado como uno de los primeros Polos del Bienestar en el país.
Los Polos del Bienestar están concebidos como zonas de crecimiento económico estratégico, donde confluyen infraestructura, inversión privada, empleo digno, y servicios públicos. En el caso de Michoacán, el objetivo es aprovechar su posición geográfica clave y su conectividad portuaria para detonar cadenas logísticas, industria manufacturera y economía social.
El gobernador también indicó que el modelo se está diseñando para ser inclusivo, sostenible y con una fuerte dimensión territorial. “Queremos un desarrollo que beneficie directamente a nuestras comunidades, a los jóvenes, a las mujeres, al sector agrícola y a quienes históricamente han estado fuera del mapa del crecimiento”, explicó.
La inversión inicial será canalizada a obras de infraestructura básica, urbanización, energía y conectividad, con un enfoque que prioriza la colaboración entre los tres niveles de gobierno, el sector privado y las comunidades locales.
Con esta incorporación, Michoacán se posiciona como un estado clave en la nueva estrategia de desarrollo regional de México, cimentando una ruta que busca descentralizar el crecimiento y corregir las asimetrías históricas entre el norte y el sur del país.