

La pobreza en México registró una disminución significativa entre 2022 y 2024, al pasar de 46.8 millones a 38.5 millones de personas, lo que representa una baja del 17.7 por ciento, equivalente a 8.3 millones de mexicanos que dejaron esta condición, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). En el mismo periodo, la pobreza extrema también mostró una tendencia a la baja, al reducirse de 9.1 a 7 millones de personas. De acuerdo con la medición de Pobreza Multidimensional 2024, el 29.6 por ciento de la población vive en situación de pobreza, lo que significa que tres de cada diez habitantes del país enfrentan carencias y bajos ingresos, con una reducción de 6.8 puntos porcentuales respecto a 2022.
Las entidades con mayores niveles de pobreza fueron Chiapas, con 66 por ciento; Guerrero, con 58.1; Oaxaca, con 51.6; Veracruz, con 44.5, y Puebla, con 43.4, mientras que Baja California, Baja California Sur, Nuevo León, Coahuila y Sonora registraron los menores porcentajes, todos por debajo de 15 por ciento. En cuanto a pobreza extrema, Chiapas encabezó la lista con 27.1 por ciento, seguido de Guerrero con 21.3, Oaxaca con 16.3, Veracruz con 8.8 y Puebla con 7.3, en contraste con Baja California, Nuevo León, Aguascalientes, Coahuila y Colima, que no superaron el 1 por ciento.
El informe señala que, aunque disminuyeron varias carencias sociales, como el rezago educativo —que pasó de 19.4 a 18.6 por ciento—, el acceso a servicios de salud —de 39.1 a 34.2 por ciento— y la seguridad social —de 50.2 a 48.2 por ciento—, el número total de personas con al menos una carencia social aumentó 10.5 por ciento, al pasar de 37.9 millones a 41.9 millones. El INEGI subrayó que esta mejora en los indicadores de pobreza se debe principalmente al incremento en los salarios y a mejores condiciones laborales, más que a los programas de apoyo social, ya que, sin estos últimos, la pobreza habría sido de 42.7 millones de personas y la pobreza extrema de 9 millones, cifras que aún serían menores a las registradas en 2022.
En un análisis más amplio, durante el sexenio que concluyó en 2024, el número de personas en pobreza se redujo en 13.4 millones respecto a 2018, mientras que el sector no pobre y no vulnerable alcanzó a más de 42 millones de mexicanos, la cifra más alta desde que se mide este indicador. La presidenta del INEGI, Graciela Márquez, afirmó que los resultados mantienen la metodología desarrollada durante más de dos décadas y garantizan la continuidad en la medición del bienestar de la población.